Adiós al clickbait en Google Ads

En julio de 2020, Google actualizará sus políticas de información falsa para incluir el clickbait como práctica prohibida. Antes de aplicar esta política, desde Google están comunicando por correo electrónico este cambio a sus anunciantes. Ahora bien, ¿qué es exactamente el clickbait? ¿Cómo puede afectar esta nueva política a tus anuncios en Google Ads? A continuación comparto un breve resumen de lo que viene a partir del próximo mes.

Qué es el «clickbait»

Esta práctica puede definirse como un «anzuelo» para referirse a aquellos contenidos de Internet que, mediante impactantes y sensacionalistas titulares, buscan generar tráfico hacia un sitio web. Su principal propósito, por norma general, suele ser monetizar dicho sitio web a través de todo el tráfico recibido. Dicho de otro modo, es una técnica de dudosa ética que busca provocar la curiosidad del usuario y llevarle a hacer clic en el contenido. Lejos de la persuasión, suele venir acompañada de un contenido de baja calidad que acaba provocando más rechazo que agrado al usuario. ¿Cuántas veces has hecho clic en este tipo de noticias para luego ver un contenido que nada tiene que ver con el titular? 🙄 Seguro algunos enlaces de la siguiente imagen te resultan familiares…

Lo que cambia en Google Ads

Tal y como han comunicado desde Google, este tipo de contenidos serán penalizados en su plataforma publicitaria. De este modo, se prohibirán anuncios con textos o imágenes sensacionalistas para generar tráfico. Todo aquello que incite al usuario a hacer clic para averiguar el contenido completo quedará fuera de las políticas marcadas por Google. Todavía está por ver con qué severidad aplican esta nueva normativa y si, por ejemplo, dan de paso las típicas llamadas a la acción con textos del tipo «Entra ahora en la web». Además, cualquier anuncio sobre acontecimientos vitales negativos que busquen presionar al usuario para tomar medidas inmediatas también quedan fuera de las nuevas políticas para Google Ads. En este último punto quedarían incluidas todas las acciones encaminadas a la compra o la suscripción mediante estas técnicas.

¿Hasta qué punto tendremos problemas con las llamadas a la acción más utilizadas actualmente? 🤔 En definitiva, todavía está por ver cómo afectan los sistemas automáticos de revisión de Google. Al principio no serán pocas las solicitudes de apelación sobre políticas que los anunciantes harán llegar a raíz de su aplicación errónea. Pese a todo, es notablemente positivo que Google intente atajar este tipo de prácticas. Solamente así podremos garantizar un entorno publicitario «respirable» y sano para el usuario.

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